Porqué, ...

Juan 6: 66 66Desde entonces, muchos discípulos suyos se volvieron atrás y ya no andaban con él. BLP.
... se fueron; porque llegado el tiempo en que Dios agota sus "recursos" revelándose en publico , dispone que los corazones se decidan por el amor, se decidan por la intimidad, que es amor que fluye de Uno a otro como fuente de Vida, que no se interrumpe un solo minuto; Dios conmina; !sígueme!, se uno conmigo como el esposo con la esposa; abandona el "romanticismo ajeno ocasional", para hacer de cada minuto de vida, un minuto de amor; el terror humano ante esta posibilidad, la de estar unidos a Cristo Jesús y ser uno con El, los hizo huir despavoridos impulsados por su "ego solitaria" existencia que destila veneno inundando sus cuerpos de pecado.

Lucas 9: 23 23Y a todos les decía: «Si alguno quiere seguirme, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame. RVC. 37»Si amas a tu padre o a tu madre más que a mí, no eres digno de ser mío; si amas a tu hijo o a tu hija más que a mí, no eres digno de ser mío. 38Si te niegas a tomar tu cruz y a seguirme, no eres digno de ser mío. 39Si te aferras a tu vida, la perderás; pero, si entregas tu vida por mí, la salvarás. Mateo 10: 37/39. NTV.

Marcos 10: 17/22 17Cuando Jesús estaba saliendo, un hombre se acercó corriendo, se arrodilló ante él y le dijo: —Maestro bueno, ¿qué debo hacer para tener vida eterna?18Jesús le contestó:—¿Por qué me llamas bueno? Sólo Dios es bueno. 19Tú sabes los mandamientos: “No mates, no cometas adulterio, no robes, no des falso testimonio, no engañes, y respeta a tu papá y a tu mamá”. [a] 20El hombre dijo: —Maestro, yo he cumplido esos mandamientos desde que era joven. 21Jesús lo miró y con afecto le dijo:—Te hace falta una cosa: ve y vende todo lo que tienes. Dales ese dinero a los pobres y así tendrás un tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme. 22El hombre quedó muy desilusionado por las palabras de Jesús y se marchó muy triste porque tenía muchos bienes. PDT.

Lucas 14: 26/33 26«Si alguno viene a mí y no me ama más que a su padre, a su madre, a su esposa, a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, y aun más que a sí mismo, no puede ser mi discípulo. 27Y el que no toma su propia cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo. 28Si alguno de ustedes quiere construir una torre, ¿acaso no se sienta primero a calcular los gastos, para ver si tiene con qué terminarla? 29De otra manera, si pone los cimientos y después no puede terminarla, todos los que lo vean comenzarán a burlarse de él, 30diciendo: “Este hombre empezó a construir, pero no pudo terminar.” 31O si algún rey tiene que ir a la guerra contra otro rey, ¿acaso no se sienta primero a calcular si con diez mil soldados puede hacer frente a quien va a atacarlo con veinte mil? 32Y si no puede hacerle frente, cuando el otro rey esté todavía lejos, le mandará mensajeros a pedir la paz. 33Así pues, cualquiera de ustedes que no deje todo lo que tiene, no puede ser mi discípulo. DHH.

Comentarios

Entradas populares