! sin culpa !, ...

Lucas 23: 46/48 46 Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu(A). Y habiendo dicho esto, expiró(B). 47 Cuando el centurión vio lo que había sucedido(C), glorificaba a Dios(D), diciendo: Ciertamente, este hombre era inocente[a]. 48 Y cuando todas las multitudes que se habían reunido para presenciar este espectáculo, al observar lo que había acontecido, se volvieron golpeándose el pecho(E). LBLA.

... inocente, reposa la humanidad, en su sopor pecaminoso; el letargo de su larga permanencia, declarando, sin cesar, ante el dios de ese mundo, su inocencia, de ser participes, de alguna manera, en ninguna actividad justa, santa, por lo que, la culpabilidad, recae sobre Cristo Jesús, y sus "hermanos" adoptados, los cristianos, aquella muy pequeña minoría, el remanente, que como el centurión, reconocieron su culpa, su pecado, al ser testigos de la Inocencia Sagrada de Cristo Jesús, que los declara culpables de la inocencia, en la práctica de la santidad.

Juan 8: 45/49 45 Por eso, es natural que no me crean cuando les digo la verdad. 46 ¿Quién de ustedes puede, con toda sinceridad, acusarme de pecado? Y si les digo la verdad, ¿por qué, entonces, no me creen? 47 Los que pertenecen a Dios escuchan con gusto las palabras de Dios, pero ustedes no las escuchan porque no pertenecen a Dios. 48 —¡Samaritano endemoniado!—replicó la gente—. ¿No veníamos diciendo que estabas poseído por un demonio? 49 —No—dijo Jesús—, no tengo ningún demonio. Pues yo honro a mi Padre; en cambio, ustedes me deshonran a mí. NTV.