!!!Abba Padre!!!, ...

Gálatas 4: 4/7  Sin embargo, cuando se cumplió el tiempo establecido, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer y sujeto a la ley.  Dios lo envió para que comprara la libertad de los que éramos esclavos de la ley, a fin de poder adoptarnos como sus propios hijos; y debido a que somos[a] sus hijos, Dios envió al Espíritu de su Hijo a nuestro corazón, el cual nos impulsa a exclamar «Abba, Padre»[b]. Ahora ya no eres un esclavo sino un hijo de Dios, y como eres su hijo, Dios te ha hecho su heredero. NTV.
 
...que es «Papá, querido Papá», es la forma como se comunican los hijos con el Padre, hijos conforme al corazón de Dios, que en la intimidad de la realización en que lo inimaginable es la vida real, comprueban cómo esas mismas palabras son pronunciadas emocional, sentimental, circunstancialmente bajo el fundamento de la tradición que le dan forma y funcionamiento a las  conveniencias sociales y religiosas, pero que por estas mismas razones, son palabras que casi nunca se pronuncian por parte de los hijos, siendo en cambio la raíz en la que por Amor, los hijos se expresan por Amor al Padre que es Dios, que es su creador, que su Señor y que es su Salvador. 
 
Los hijos adaptados en Cristo Jesús, son lo que llevan a Cristo en su corazón, son los herederos de su Padre porque son coherederos con Cristo Jesús, herederos que reciben como herencia la capacidad para reflejar el carácter de su Padre, y venir a ser por lo tanto papás de los hijos que les nacen debido a esa herencia, en la que Dios El Padre les delega la posición que le corresponde solo  El, la condición de ser los papas que revelan con su Amor el genuino y Único amor de Dios el Padre. Padre, herencia que supera todo argumento y raciocinio humano, que en su mas grande esfuerzo, solo alcanza a considerar la manera de competir con los demás en cantidad y valor de cosas materiales que les "heredaran" a los que llaman hijos, pero que no conocen y ellos tampoco.
 
Marcos 14: 35/36  35En seguida Jesús se fue un poco más adelante, se inclinó hasta tocar el suelo con la frente, y pidió a Dios que, de ser posible, no le llegara ese momento. 36En su oración decía: «Abbá, Padre, para ti todo es posible: líbrame de este trago amargo; pero que no se haga lo que yo quiero, sino lo que quieres tú.» DHH.  
 
Romanos 8: 14/16 14 Los que se dejan conducir por el Espíritu de Dios, esos son hijos de Dios. 15 En cuanto a vosotros, no habéis recibido un Espíritu que os convierta en esclavos, de nuevo bajo el régimen del miedo. Habéis recibido un Espíritu que os convierte en hijos y que nos permite exclamar: “¡Abba!”, es decir, “¡Padre!” . 16 Y ese mismo Espíritu es el que, uniéndose al nuestro, da testimonio de que somos hijos de Dios. BLP.
 
Mateo 23: 9 9 Y no llamen ustedes padre a nadie en la tierra, porque tienen solamente un Padre: el que está en el cielo. DHH.
 
 
Lucas 11: 11/13 11 ¿Quién de ustedes, si su hijo le pide pan, le da una piedra? ¿O si le pide un pescado, en lugar del pescado le da una serpiente? 12 ¿O si le pide un huevo, le da un escorpión? 13 Pues si ustedes, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡Cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan!» RVC.
 
 
 
 
 
 
 
 

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